Soy una profesional empática, caracterizada por escuchar a los pacientes, para conocer cuál es la afección de la que padecen, así como entender la forma en que esta le ha afectado a su vida y a quienes rodea; en casos particulares como a la hora de tratar a los niños, el ejercicio consiste en tranquilizar a los padres; siempre lo he dicho, “a veces uno va el doctor no solo para saber qué necesita, sino también para conocer qué le pasa”.

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Mi trabajo destaca, gracias a que me intereso por explicar en detalle la conclusión del diagnóstico, de esa manera se entiende mejor su condición, agilizando el inicio del tratamiento a realizar.